7/22/2011

Una visita a David Salomón



Se dice fácil. Ves una colección de moda, te agrada la propuesta, saludas al diseñador y le dices ahí, a quema ropa: “quiero comprarte algo de lo que vi.” Después crece la expectativa. El diseñador no vive en el Distrito Federal. Alguien te cuenta que sus prendas tienen acabados de primera y que su estudio está muy bien puesto. Finalmente se presenta la ocasión: voy de vacaciones a Cancún y encargué, vía mail, un vestido color chocolate de dicha colección.
Llegamos a la cita (mis primas y yo) una hora tarde. Aunque parezca maldición, encontramos tráfico tipo DF en Cancún. Pero David Salomón no sólo estaba de buenas, sino que se disculpó por haber atendido a una clienta mientras nos esperaba.
El atelier es una casa muy señorial. Pero desde la entrada hay racks con vestidos, maniquíes, vitrinas con joyería, anaqueles con zapatos y bolsas así como varios rollos de coloridas telas acomodadas en las paredes. Subiendo las escaleras, lo que fueron los dormitorios de la residencia se han convertido en talleres de corte y costura. En el segundo piso está también la oficina del diseñador.
David Salomón en su estudio y yo, con uno de sus diseños.
Lo primero que veo al entrar a la oficina es mi vestido. Me lo pruebo y todas nos sorprendemos por su belleza. Me queda pintado. Después saco el sari que me compré en India y que quiero que Salomón transforme en algo más fácil de poner. Hablamos de las posibilidades, no llegamos a ningún acuerdo. Entonces se le ocurre que me pruebe otros vestidos para ver si me van bien. Ahí empieza el problema: todo me gusta. Mis primas eligen sus favoritos y nadie está de acuerdo. Un vestido blanco de la misma colección del que me mandé a hacer se vuelve de mi propiedad en el momento en que me veo en el espejo. “El vestido perfecto para la madrina”, dice el sabio Salomón, eliminando la posibilidad de que lleve a bautizar a mi ahijada con cualquier otro atuendo. Después voy por un vestido largo. Hace años que no tengo ninguno. Viene uno hermoso, perfecto para playa, pero no para la ciudad. Más adelante me traen uno igual al que usó Bárbara Mori. Le sigue uno color durazno muy elegante. Otro verde y dos estampados no pasan la prueba. Hasta que me puse uno negro y sucedió el milagro: todos estuvimos de acuerdo. No había duda. Ya tenía vestido largo.
Entre un vestido y otro, Salomón decidió probar suerte con su nueva colección de zapatos. Mandó a traer todos los de mi número, lo que no es fácil, porque tengo el pie pequeño y flaco como Vilma Picapiedra. Tuve que resignarme a comprar sólo unos pares, porque las zapatillas me quedaron flojas.
Salí de ahí llena de paquetes. Pasé una noche fantástica. Todas las primas disfrutaron de verme ponerme y quitarme ropa como si fuera una Barbie. Nada más convincente que un diseñador bien hecho y con talento. Pero si a eso le sumamos que Salomón es supersimpático, pues no hay quien se le resista. Lo digo yo que iba por un vestido y salí con tres, más cuatro pares de espléndidos zapatos. El atelier debería tener un letrero a la entrada que diga: ¡Cuidado con el encantador de mujeres!

7/10/2011

LaBeauty Lazartigue



Jean- Francois Lazartigue es uno de los mejores especialistas en cabello en Francia. Hace algunos meses sus productos aterrizaron en los anaqueles de Saks con el fin de ofrecer soluciones a las cabelleras mexicanas.
Según las palabras del propio Lazartigue, lo más complicado es llegar a una formula cuya textura sea agradable y el resultado salte a la vista. El especialista francés se ha dado a la tarea de resolver las necesidades de cada cabello, para lo cual no es raro que someta a su clientela a un análisis de su cuero cabelludo, la salud de sus folículos así como las posibles problemáticas de la piel.  “Seducir es la palabra clave, asegura. “Damas y caballeros saben que el pelo seduce.” No podríamos estar más de acuerdo. Uno adquiere seguridad cuando el cabello está bien tratado y se siente hidratado. “Pero hay que aprender a tratar la prolongación del cabello como parte de la piel”, comenta el experto. “El cabello maltratado puede conducir a la calvicie”, arremete el creador de una línea sensacional de cuidado para el pelo que cubre padecimientos como caspa o caída del pelo, hasta emulsiones para tratar las melenas resecas o teñidas.

Yo probé la mascarilla hidratante Hydratant Masque Avant-shampooing, un tratamiento para hidratar la cabellera antes de lavarla. La textura es agradable, al igual que su aroma y deja el pelo listo para usar el shampoo Hydratant Moisturizing treatment. Ambos productos logran que la melena se sienta sedosa y conserve un aroma delicado.










7/08/2011

Limpieza de rostro



No importa la edad o el sexo, la limpieza de la piel del rostro debe de llevarse a cabo con cierta regularidad. Eso implica la extracción de puntos negros, la exfoliación e hidratación. Cada SPA tiene su menú de servicio que va desde una limpieza básica, hasta tratamientos sofisticados con aromaterapia y/u oxígeno.
Como yo tengo la piel delicada y muy alérgica, no puedo someterme a cualquier tratamiento y tengo mucho cuidado al elegir un lugar con gran prestigio y un personal capacitado antes de someterme a cualquier cosa. Por ello, llamé a mi amiga Estela Sáenz, la dueña de la agencia de modelos Shock para que me recomendara su lugar spa favorito. Estela tiene un cutis radiante y ha enviado a todas sus chicas al mismo sitio para que tengan una tez envidiable. El lugar: el Guinot Institut- Paris. En Miguel Ángel de Quevedo 332, en Coyoacán.  Teléfonos: 54848056 y 5554-6963.
Mi experiencia fue magnífica. Me ofrecieron una limpieza facial para cutis delicado y como los productos Guinot no tienen perfume, tuve la posibilidad de que me aplicaran toda clase de mascarillas y tratamientos sin que mi piel se irritara. Por el contrario, al salir de la sesión, mi tez lucía luminosa, hidratada y se sentía varios años más joven. Además, los precios me parecieron muy razonables.
Pero hay más buenas noticias: hay sesiones y productos especializados en acné, depilación con pulsación de luz, faciales, masajes, camas de bronceado, diseño de cejas y tratamientos reductivos.

7/03/2011

MODA MASCULINA- Mala idea: mocasines para el traje


Es como si una mujer se pone un vestido con zapatos bajos. Bueno, ni a Carla Bruni se le ve bien esa coordinación.
Los mocasines son zapatos semiformales que se llevan de maravilla con un combinación de saco sport con pantalones más vestidores, o bien, con jeans. Cuando es viernes casual o fin de semana, los mocasines son fantásticos porque no se ven como calzado de oficina, ni se van al extremo de los tenis.

Para el traje, en cambio, no hay como los zapatos de agujetas. Estos pueden remplazarse por unos zapatos de meter, pero altos en el empeine. 

7/01/2011

Tacones para seducir



Hay mujeres que no conciben la vida sin ellos. Otras, en cambio, los desprecian por la incomodidad que suponen. Pero no he conocido un hombre que no sucumba ante ellos. Los zapatos altos pueden ser más importantes en tu vida de lo que imaginas.
Recuerdo haber leído una pequeña columna escrita por mi colega José Ramón Huerta en la revista Marie Claire, en la que ahora trabajo. En ella, JoseRa, como le decimos sus amigos,  hablaba de lo importante que resultaban los zapatos altos en el sensual caminar de una mujer.
Ciertamente los zapatos de tacón modifican la postura, la proporción y la seguridad de quien los lleva puestos. Cuando una fémina sabe manejar los tacones siente el mundo a sus pies. Pero cuando, además, puede poner el toque focal de su atuendo con un par de stilettos, se rodea de una sensualidad irresistible.
Conozco a muchos hombres que compran lencería para ser seducidos por su pareja. Sin embargo, jamás he escuchado de alguno que invierta en un par de tacones con el mismo propósito. Seguramente no se ha imaginado a esa mujer en la cama, desnuda, pero con sus zapatos puestos. Si así fuera, iría directamente a la zapatería y definitivamente se ahorraría la lencería.